lunes, marzo 05, 2007

Si me permites, me voy a apropiar lo de gran conocedor de nadas. Porque, efectivamente,
nada es lo que conozco. Aunque, si tomamos el universo como la nada, a lo mejor, conocemos bastante.
Pero la sensación es que cada vez sé menos de mí mismo y de mi entorno. Sólo sé mis circunstancias y mis mezquindades, pero a veces pienso que no son suficientes para llegar a conocerme en la totalidad.
No sé quién soy y no sé qué hago aquí. Sé que estas preguntas no son mías, que son de todos y de quien no son es porque todavía no se lo han preguntado.
Cuando bajo a coger el metro, veo a la gente correr. Según me voy metiendo en el tumulto, voy cogiendo la carrera que lleva la generalidad de la gente. Todos corremos porque dudamos, y ante la duda, aceleramos para ver cuál es la respuesta final. Todos corremos para contestarnos a nosotro mismos la misma pregunta. A lo mejor corremos para no tener una pregunta atroz que resuene una y otra vez en nuestras mentes. Porque cuanto más nos preguntamos a nosotros mismos, menos sabemos. Y si no nos preguntamos, es porque no sabemos que no sabemos.
Pensamos a corto plazo porque a largo, sólo encontramos la finitud y eso nos desagrada ¿y qué hay después de la finitud? La nada. La nada de nadie pero que es de todos.
Necesitamos metas inmediatas. Necesitamos retos finitos. Nadie se quiere embarcar en una odisea, porque siempre después de una odisea viene la calma, la felicidad y esas cosas ponen nerviosos a los hombres de hoy. Es curioso que lo que más deseamos, es lo que queremos que nunca se haga realidad.
¿A qué viene todo esto? A que no tenía nada que contaros y lo que quiero en esta vida es ser feliz.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Quizás no tenías nada que decir pero realmente lo has dicho todo.
En realidad creo que las personas han dejado de preguntarse el por qué y se está limitando a vivir como le dejan.La gente corre porque necesita enlazar cada día de su vida y si pierdes un tren, un metro, un autobus o lo que sea, parece que perdemos un precioso segundo de la misma. Se corre para no tener qué pensar en qué hacer mientras que se espera al siguiente. Se corre para no darse cuenta de lo que pierdes en el transcurrir y sobre todo se corre para saber que has llegado a tiempo a eso que crees tan necesario. Por cierto, yo sé quién eres, eres una persona especial que se pregunta si lo que hace es suficiente para lograr la felicidad.

Sonofotlon dijo...

Solo sé que no sé nada.... decía un granfilósofo.
El principio de la sabiduría es la incertidumbre.
Su post me lleva a recorer infinitas citas de distintos pensadores respecto a vivir y ser feliz, pero creo que con la que me voy a quedar es una frase de Charly García donde dice en una de sus canciones.." No hay una escuela que enseñé a vivir" y por otro lado le doy la razon a otra canción que todos conocemos.."my way"...Creo que ambas sintetizan un trecho al camino que buscamos siempre y cuando no se perjudique al prójimo.

Anónimo dijo...

Sí eres un experto conocer de la nada... se nota cada vez que no cuentas nada...y sin querer... te vuelves a desnudar y lo cuentas todos.

A mi me encanta leer nada... y me perturba ser una gran ignorante de todo... eso significa que también sé de la nada?... o que la ignoro también por completo...

Dentro del todo entra la nada? y cuando la nada es todo... qué?... que me dices?... Qué pasa cuando la nada lo es todo?...

Dior... a vueltas de nuevo... tengo mi parte transcendente a flor de piel últimamente... y eso que sé perfectamente de donde vengo y a donde voy... de casa al trabajo y del trabajo a casa...

Ignoro todo e ignoro nada...

Muxuak.
Mss. Hyde.