miércoles, diciembre 05, 2007

Yo no sé si creo o no creo. No estoy diciendo que sea agnóstico, que esa no es la cuestión y con la iglesia en este texto no habéis dado. Me estoy refiriendo a si yo lo que yo he escrito, ya lo han escrito otros antes; si lo que he vivido, ya lo han vivido antes. Un amigo mío, cuando leyó lo que me aconteció hace muchos años en un citröen Gs, me dijo que a él le había pasado lo mismo en un Ford Capri. Pierde entonces mi anécdota todo atisbo de originalidad pues lo que conté de igual manera les sucedió a otros.
Mi historia se ha contado en el pasado en una tasca, en un restaurante, en la cola de un cine, haciendo unas chuletas a la barbacoa por gente que no soy yo pero que tiene la misma historia que contar, sólo que le pasó en un Renault Fuego, Hyundai Coupé, Golf Gti y el que ahora pongas tú, pues una vez un fitipaldi te llevó de marcha y cuando te bajaste besaste el suelo.
De los bares de copas de Cuéllar se pueden contar historias mucho más interesantes que la mía. Por ejemplo la tuya, mujer. De cuando conociste a ese chico tan especial con el que pasaste la noche y que jamás volviste a ver. Sin embargo, esa historia la pueden contar centenares de chicas que pasaron por Cuéllar, y miles de mujeres que una noche salieron de juerga por toda España.
Entonces, ¿Se pueden calificar mis bitácora de creación? Me pasa lo que te pasa a ti, sufro por lo que tú sufres y tengo la misma visión de la vida que la que tú tienes. Si no piensas como yo, entonces es porque pienso como la gente que tiene una visión de la vida distinta a la tuya. Sin embargo, eso no nos hace más originales que los de vuestro grupo. En el fondo, da igual en el agujerito por el que te asomes a la vida: otros han mirado antes. Sólo unos pocos de nosotros han tenido el valor de coger la taladradora y hacer un agujerito nuevo por el que luego todos nos asomamos.
¿Esto es una nueva creación o una mera ilusión de que estoy haciendo algo nuevo? Creo que lo segundo porque no aporto nada nuevo. mi nueva entrada es como el nuevo windows xp, al que todos llaman Vista.
No inicio un camino nuevo en eso de cuestionar la propia obra. Por eso, esta entrada es la menos original de todas, pues tengo una extraña sensación de Dejá vú.
Alguien lo debió escribir mucho antes.